Juangu Brannerud con su medalla de los 100 libres |
Imagen: Malmö Kappsimningsklubb |
En la segunda jornada de competición, nadaba los 100 metros mariposa, donde entraba de nuevo en una final gracias a sus 54,82 matinales. Batía así su mejor tiempo de 55,38 que databa de diciembre de 55,38. En la final no podía con su nueva plusmarca, tras pasar excesivamente rápido en 25,52. Finalizaba octavo con 55,35, también por debajo de su anterior marca personal. Al termino de la jornada nadaría el 4x50 metros libres, haciendo en primera posta 23,01, su segundo mejor tiempo de siempre, por detrás de los 22,73 de diciembre de 2014.
La tercera jornada veía la mejor versión de Brannerud en una de sus mejores pruebas, los 200 metros libres. Se lanzaba a por todas en las series matinales, con el objetivo
claro de romper su mejor marca y de acceder nuevamente a la final absoluta. Gran
carrera para él, pulverizando sus mejores 1.49,57, para dejarlos en unos tremendos 1.48,15, entrando de nuevo en una final A vespertina,
y sobre todo, nadando por debajo del RRA. Su tiempo, que como comentábamos no puede considerare récord pese a que a toda luces lo es, rebaja la marca de 1.48,59 del olímpico Benjamín Hockin (Récord Regional Absoluto) y los 1.48,67 de otro olímpico, Javier Núñez como Récord Provincial. Impresionante este nadador, que por la tarde hacía otros buenos 1.49,10, pasando más rápido que por la mañana, pero pagando su esfuerzo en los últimos compases de la prueba. Era octavo, codeándose con nadadores de mucho nivel y sin desentonar un ápice entre ellos, más bien al contrario.
En la cuarta jornada, muy bien en los 50 metros libres, nadando en 22,98 a un paso de la final A, siendo 11º. Por la tarde realizaba 23,07 para ser 12º. Volvía a competir al término de la sesión en los 4x100 metros libres, en los que hacía otro "marcón" en su segunda posta, con 48,59. Gran nivel a pesar del cansancio acumulado tras tres días de competición. En la última jornada demostraba que ese tiempo del relevo no era casual, y en la prueba en linea de los 100 libres accedía como tercer mejor tiempo a la final A gracias a sus 49,36 que suponen su mejor marca personal, anterior 49,49 (2013). Por la tarde explotaba definitivamente, confirmando (por si había dudas) su gran momento, y con 48,89 se subía al pódium a recoger la medalla de bronce. Espectacular Brannerud, poniendo la guinda a un campeonato excelente. Por la mañana nadaría los 50 metros espalda, donde recientemente había realizado 25,90 manuales (Bartolomé Sansó el 3 de octubre). En la series realizaba unos buenos 26,21 (12º), pero no nadaba la final de la tarde. Quemaba los últimos cartuchos en el relevo 4x100 estilos, donde nadaba la posta de mariposa en otros buenos 54,77.
Puede estar muy orgulloso este joven del papel realizado en este nacional. Veamos si esta inyección de moral le hace volar en el regional absoluto de la próxima semana, en su piscina y con su gente, y posteriormente en el nacional absoluto. Estaremos muy pendientes de sus evoluciones, sin duda esta temporada puede ser la suya.
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