Open Absoluto de Primavera 2016. Crónica segunda jornada

Se reanudaba la competición en Sabadell tras la resaca de la sesión inaugural donde los nervios y la presión de lograr mínimas o marcas de entidad no permitieron a gran parte de nuestra expedición mostrar todo el talento que atesora, pero con el amanecer de una nueva jornada los nadadores volvían a buscar sus objetivos en las instalaciones Carles Ibars.

La primera prueba de la sesión, sin presencia canaria, eran los 400 metros estilos femeninos con una favorita indiscutible Mireia Belmonte (90-UCAM). La badalonesa ya de buena mañana superaba la mínima olímpica con 4.39,78, y se imponía por la tarde con la segunda mejor marca mundial del año, 4.33,42. Se llevaba en volandas a María Vilas (96-Riveira), que también se ganaba su billete a Río con 4.38,81.

Dos de nuestros mejores abanderados, Raul Santiago Betancor (97-Metropole) y Alejandro García Ramírez (98-Metropole) nadaban las series matinales de los 400 metros estilos masculino. Ale llegaba inscrito con sus 4.29,37 (MMR-17) del pasado Open de Málaga 2015, con el objetivo en mente de los 4.26,72 que le darían el pase para el Eurojunior húngaro. Raúl venía con una marca de 4.31,76, realizados el pasado año en esta misma competición. Raúl era el más rápido de los dos por la mañana, y con 4.33,06 se clasificaba para la final B. Alejandro se marchaba hasta 4.37.07, entrando en la final C. En las finales vespertinas, Raúl realizaba unos buenos 4.32,46 (14º), con parciales de 1.01,50 en mariposa, 1.11,95 en espalda, 1.17,83 a braza y 1.01,18 a crol. Estaba cerca de superar su mejor registro, y era solo en el crol donde subía su parcial respecto a su récord personal (1.00,06 por los 1.01,18 de hoy). Alejandro por su parte, sigue sin poder ofrecer la mejor versión de si mismo, tras una espiral de lesiones que no le ha permitido refrendar sus tiempos. Dice mucho de él el hecho de que esté aquí intentándolo, y dándolo todo en cada ocasión, aunque el cuerpo no acompañe. Hacía una marca de 4.35,98 (20º), con pases de 1.01,69, 1.12,16, 1.19,89 y 1.02,24. En la prueba se batía el Récord de España Absoluto, de la mano de Joan lluis Pons (96-Palma) con 4.15,49, que es además mínima olímpica. Hugo González (99-Canoe) superaba por dos veces la MMN-17, dejándola en 4.18,29 (mínima europea).


A continuación se nadaban los 100 metros mariposa femeninos, prueba en la que nadaba Laia Quintilla Modrego (88-Metropole). Bien estaba la metropolista en las preliminares, aunque con 1.02,90 se quedaba a poco más de una décima de la final A, accediendo a la B como cuarta clasificada. Por la tarde mejoraba su tiempo, repitiendo posición con 102,45, no excesivamente lejos de sus mejores 1.01,77. Sin mínimas absolutas en esta especialidad, donde se imponía Judit Ignacio (94-Sabadell) con 59,25.

En los 100 metros mariposa masculinos, se quedaba en las series Moritz Berg Eischeid (93-Canoe), a pesar de lograr unos estupendos 55,78, que son por tres centésimas su mejor marca personal. Su crono matinal le clasificaba para la final B, pero no accedía a ella, entendemos que por la normativa de la competición. Konrad Czerniak (89-Sabadell) se imponía de manera insultante con un registro de entidad mundial, 51,31. Alberto Lozano (Alcorcón) superaba la MMN-18 en las series con 53,00 (refrendando mínima europea Junior).

Impresionante la actuación de Cintia Álvarez Pérez (95-Metropole) en los 50 metros espalda femeninos, haciéndose con una medalla de bronce de mucho valor. En una competición con el nivel más alto que se recuerda, en la que todos los nadadores del territorio nacional están en su mejor momento, Cintia nadaba por la mañana en 29,83, batiendo el RPA (Récord provincial Absoluto) de Gran Canaria de Escarlata Bernard (89-Metropole), que desde el año 2006 estaba en 30,08. Con ese gran crono entraba en la final de la tarde, en la que volvía a mejorar su marca, y la llevaba hasta 29,65 con los que era tercera. Se convierte en la nadadora canaria más rápida de la historia en esta distancia, solo superada por el fichaje de la ADSC, Mercedes Peris, que tiene el RRA con 28,84 desde 2008 y que vencía hoy con 28,18. Ya en piscina corta tiene este privilegio con sus 28,50 de diciembre de 2014.

Imagen Vicky Clark
También muy buenas noticias en los 50 metros espalda masculinos, en los que Alejandro Calderón Iglesias (98-Escuevas) lograba en las series la mínima para el Europeo Junior de Hungría con un gran crono de 26,10, por debajo de los 26,13 exigidos y de sus mejores 26,12 del pasado año. A pesar de que en los criterios de selección se indica que los registros han de lograrse en las finales, se comenta que la realización de las mínimas se extiende también a las series. Confiamos en que así sea, ya que por la tarde estaba en otros buenos 26,32, que están por encima del crono exigido. El registro de Calderón pone coto al Récord Regional Absoluto (RRA) en posesión de Carlos Van Isschot con 26,00 desde 2009. Excepcional este joven, en su primer año entrenando en la península. Título para Aschwin Wildeboer (86-Sabadell) con 25,37, con MMN-17 para Hugo González (99-Canoe) con 26,12, marca que de haber obtenido la nacionalidad antes, hubiera igualado la de Calderón con su edad.

Sin nadadoras canarias ni mínimas internacionales en los 200 metros libres femeninos. Vencía la finalista mundialista, Melani Costa (89-UCAM) con 1.58,78.

En los 200 metros libres masculinos, prueba que cerraba la sesión, nadaba Alejandro García Ramírez (98-Metropole), que se quedaba en las series matinales con 1.57,23 (46º), muy lejos de su crono de 1.53,92 del pasado verano . Era baja Alejandro Calderón Iglesias (98-Escuevas), en una prueba habitual en su calendario nacional. Un viejo conocido de nuestra natación, Ernesto Crox Acuña (90-Canoe) se clasificaba para la final B con 1.52,57, tiempo que igualaba por la tarde con 1.52,54 (12º). El triunfo era para César Castro (99-Plasencia) con 1.49,31 (MMN-17), en una prueba en la que se esperaba más de los españoles, puesto que tenemos relevo clasificado para los Juegos Olçimpicos y solo tres de ellos estaban por debajo de 1.50 en la final, sumando a Víctor Martín, que lo hacía por la mañana (1.49,62), pero no nadaba por la tarde por enfermedad.

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